La falta de agua es un problema de sobra conocido por todos los agricultores valencianos. La sequía genera pérdidas de cultivos año tras año. Ante la ausencia, por ahora, de proyectos trasvasistas de futuro, la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, ha encargado al Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) la creación de nuevo material vegetal con menores necesidades de riego y mejor adaptado al cambio climático, es decir, mayor capacidad de resistencia ante el estrés hídrico.
Esta medida forma parte del plan de acción para este año elaborado por la Conselleria y aprobado recientemente por el Consejo del IVIA. Otro de los puntos incluidos es la creación de cultivos con una mayor resistencia natural a las enfermedades y con mejores condiciones organolépticas y de conservación. De esta manera se busca que los cultivos valencianos se adapten mejor a las exigencias de calidad de los mercados.
Este nuevo material debe ser, además, aprovechable para el cultivo ecológico y para la recuperación de cultivos y sabores tradicionales.
Dentro del plan de acción de la Conselleria se prima asimismo controlar y prevenir las plagas y enfermedades que afectan a la agricultura valenciana, reduciendo el impacto ambiental de los métodos de control y potenciando los medios de control biológicos o más ecocompatibles. Es ya de sobra conocida la importancia que la actual consellera, Elena Cebrián, otorga al uso de métodos ecológicos en los campos.
De hecho, en el plan se le encarga también al IVIA «reducir las barreras» para la extensión del cultivo ecológico. Esto se haría, por ejemplo, mediante la contribución al aumento de materias orgánicas certificadas; demostrando la importancia de la actividad biológica del suelo para la salud y fertilidad del cultivo en condiciones ecológicas; o desarrollando métodos para mejorar la calidad biológica del suelo.
Otro de los objetivos es «optimizar el manejo del agua, suelo y la fertilización nitrogenada» bajo un escenario de cambio climático o sequía. Para ello, según el plan aprobado, antes que nada habría que determinar las necesidades de agua para los cultivos de la Comunitat y los nuevos sistemas de producción ecológica.
Además, habrá que desarrollar y experimentar con nuevas tecnologías de riego y sistemas que mejoren la eficiencia del uso del agua. Se persigue de esta forma aumentar el «efecto remediador» de la agricultura para reducir el cambio climático y, al mismo tiempo, aumentar la sostenbilidad económica de los cultivos.
Source: Comunitat Valenciana