“Un atentado cometido en Occidente vale por mil perpetrados aquí”, dice el cabecilla del estado Islámico, Abu Bakr Bagdhadi en el último mensaje difundido y que va dirigido a los militantes de la banda yihadista, a los actores (“lobos”) solitarios o las células. El “califa” llama a atacar sin piedad a los “adoradores de la Cruz”, en referencia a los cristianos, a los que considera “nietos de monos y cerdos”.
Según expertos consultados por LA RAZÓN, el mensaje rezuma un cierto “perfume” derrotista envuelto en el fanatismo del personaje que viene a decir, citando versículos de El Corán, que son momentos de tener paciencia porque, al final, llegará la victoria sobre los infieles y apóstatas.
Se dirige a los yihadistas que se encuentran en Occidente, en Europa o América, para que sigan “su camino, confíen al Alá, y lleven a cabo ataques que rompa el corazón (de los cristianos), los destroce, ya sea con disparos o una puñalada; un bombardeo en sus países. No te olvides de atropellar gente en las calles y carreteras. Enciende tu lucha, para que los cruzados sientan sus llamas. Los soldados del Califato y sus seguidores no deben perdonar a ningún secularista, ateo o apóstata”….
Con respecto a los actores solitarios, Bagdhadi insiste en “tomar el ejemplo de los que están delante de vosotros (por los que ya han cometido atentados) y perpetrar bombardeos, realizar disparos y ataques vehiculares, ya que Alá les recompensará. Los partidarios del Califato deben seguir este camino, confiar en Ala”. Al llevar a cabo los ataques, “no te olvides de ejecutar personas de tal modo que se extienda el miedo a los otros Cruzados”.
El “califa” considera que Occidente está en declive, en una situación de pérdida y disolución, por sus caprichos y porque los cristianos manipulan el Islam. Las naciones de la incredulidad vagan tus tierras y establecen fronteras de humillación y vergüenza”.
El discurso de Bagdhadi, titulado, «Give Glad Tidings to the Patient», en referencia a la paciencia que pide a sus seguidores y para darles buenas noticias, dura 54 minutos y 39 segundos en audio y fue producido por la división de medios central del Estado Islámico, al-Furqan Fundación.
Pide la libertad de Andrew Brunson, pastor evangélico estadounidense encarcelado en octubre de 2016 durante la ola de detenciones que realizó el gobierno de Turquía tras el fracasado intento de golpe de Estado de julio de ese año contra el presidente Recep Tayip Erdogan. Fue acusado de formar parte de un grupo terrorista armado. En 2017, fue imputado con cargos por espionaje e intento de derrocar al gobierno.
“Si una persona mira a la verdad, entonces se daría cuenta de lo que se ha convertido América, protectora de la Cruz, después de su entrada en confrontación directa con los hijos del Islam durante casi dos décadas. Así está ahora, por la gracia de Alá, viviendo el peor período en su historia contemporánea, como lo dicen sus presidentes y sus superiores en una situación que anuncia su desaparición, con el favor de Alá”.
“El período donde el Islam es humillado ha terminado. El período en que la sangre de los musulmanes es barata ha terminado. El período de la esclavitud ha terminado. ¡Oh soldados!, ustedes serán la ignición del fuego, atacarán después del ataque. No descanse nunca. Únete y organiza tu ejército”, asegura.
“En cuanto a ustedes, ¡oh seguidores del Califato! en todas partes, en los medios y en los campos, darles noticias de que el Estado Islámico está en la mejor forma porque desea lo que está con Alá, y lo que está con Ala es mejor y más duradero. No te dejes horrorizar por la campaña de difamación y engaño intencional, por los enemigos de Alá. Cuidado con los leones (sic) de la información y medios, tenga cuidado de recibir sus noticias de alguien que no sea el medio central del Estado islámico”.
Para justificar las derrotas en Iraq y Siria, Bagdhadi dice que “la tierra de Alá es amplia y las mareas de la guerra cambian”. “En el Estado Islámico hemos preparado para ustedes, ¡oh protectores de la Cruz y asesinos de la gente sunita en la tierra de Siria y en todas partes, algo que no olvidarás”.
Fuente: La Razón