Como bien sabemos tirar petardos es una costumbre bastante popular en determinadas fechas o festividades como la Navidad o las Fallas de Valencia. Aunque hay ciudades españolas que tienen prohibido en su ordenanza municipal lanzarlos, al igual que pasa con el disparo de cohetes, este no es el caso de la Comunidad Valenciana.
En ciertas ocasiones, una mala práctica ha generado ciertos contratiempos y malestar en la ciudadanía en general. Por este motivo, la normativa regula el uso correcto y establece multas y sanciones si se incumple. A la hora de vender o comprar una vivienda en zonas próximas a la celebración de estas fiestas, habría que valorar las ventajas y posibles inconvenientes como el ruido. En este caso, lo mejor es echar un vistazo a esta web y ponerte en manos de profesionales para un asesoramiento adecuado.
La inversión en un inmueble no se hace al azar, y por dicha razón en la compra venta de una vivienda se barajan un gran número de factores. De hecho, la zona geográfica también influye en la decisión final. Es obvio que en las zonas céntricas tenemos todo a nuestro alcance, e incluso cualquier piso está mucho más valorado. No obstante, cuando se desarrollan actividades relacionadas con fiestas tradicionales hay que tener en cuenta cómo nos pueden afectar a la rutina diaria.
Por otro lado, debemos saber que vivir en cualquier vecindario o edificio supone respetar unas normas de convivencia por el bien general. Si se va a invertir en una vivienda, lo aconsejable es ponerse en manos de profesionales del sector. La asesoría inmobiliaria Cuenca & Mirasol es una gran garantía, ya que cuenta con un equipo cualificado, serio y comprometido para hacer un estudio o valoración en función de las necesidades del cliente.
La tradición fallera y los petardos
Cuando se aproxima el último domingo de febrero, el nerviosismo se siente en las calles de Valencia. Sus vecinos esperan con mucha ilusión la celebración de sus fiestas tradicionales. Lo más normal es tener presente el ruido y la pólvora, porque los petardos, mascletàs y castillos de fuego forman parte de una tradición muy arraigada.
El lanzamiento de petardos en las Fallas de Valencia se contempla dentro de la legislación del Bando Fallero que dicta el alcalde de la ciudad. Es cierto que uno de los aspectos más conflictivos se relacionan con este tipo de pirotecnia; aunque, los ciudadanos están ya acostumbrados a ello. Pero, esto no quiere decir que su uso siempre se haga conforme la normativa para evitar molestias al resto de personas.
La Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU) cumple un papel muy importante y defiende el espíritu de convivencia. Entre sus objetivos se contempla recordar a los particulares la prohibición de tirar petardos en ciertas zonas, sobre todo de juegos infantiles, así como usar pirotecnia no autorizada.
Hace un par de años se implantaron unos horarios en los que se prohíbe disparar petardos con las sanciones y multas correspondientes si se incumplen una serie de medidas. Por ejemplo, cabe señalar que esta prohibición se extendía principalmente a los días no festivos, los laborables, así como los no incluidos en la semana principal de las Fallas, en el horario comprendido entre las 22:00 a las 07:30 horas.
También cabe señalar que se contemplan una serie de categorías y edades para el uso de este material pirotécnico.
- En la categoría I, la prohibición se extiende a los menores de ocho años de edad. En este sentido, se determinaba que su peligrosidad es muy baja.
- Para la categoría II, la restricción era para los menores de 10 años.
- En la categoría III, que hace alusión a las baterías o truenos, teniendo en cuenta su peligrosidad media y el uso en las extensiones grandes al aire libre, la edad mínima es de 18 años.
- Finalmente, la categoría IV hace alusión a la pirotecnia de alta peligrosidad. El uso solo está recomendado para expertos y profesionales.
El uso de los petardos: recomendaciones y precauciones
A todo el mundo le gusta divertirse y pasar un rato entretenido con sus amigos y familiares cuando llegan las Fallas de Valencia. Pero hay que respetar a los vecinos y cumplir con las normas de convivencia de los diferentes barrios.
No olvidemos que los ciudadanos deben seguir con su vida laboral o que pueden existir personas mayores con problemas de salud, entre un sinfín de situaciones, que en muchas ocasiones, se pasan por alto. Por lo tanto, si el exceso de ruido en los horarios permitidos, ya de por sí genera molestias; mucho más si no se cumple la normativa.
Lo más normal es que las viviendas ubicadas en las zonas céntricas o cercanas al ambiente festivo estén más expuestas a los ruidos durante estas fechas de celebración de las Fallas. Dicho esto, es conveniente no saltarse la normativa, pero también mantener una conducta cívica, que no ocasione problemas en los vecindarios, sobre todo en los días y horarios inapropiados.
A continuación se proponen una serie de recomendaciones a las que es necesario prestar atención en estos días tan señalados e importantes para Valencia.
- En primer lugar, hay que tener en cuenta que los petardos se deben comprar en establecimientos autorizados para ello.
- Los niños que usen petardos deben estar supervisados por un adulto.
- Por otra parte, hay que evitar sostenerlos en la mano cuando se encienden. Y en el caso de lanzar cohetes voladores se recomienda usar soportes especiales.
- Si por cualquier motivo un petardo no prende no deberá manipularse de nuevo hasta que hayan transcurrido unos 30 minutos.
- Los petardos nunca deberán arrojar sobre otras personas, animales u objetos. En este sentido, se hace especial hincapié en las papeleras.
- La normativa también indica que no hay que encenderlos en el interior de un edificio ni tampoco arrojarlos desde una ventana o balcón.
¿Cómo afecta el uso de los petardos en la convivencia?
Tal como se ha explicado anteriormente, está prohibido encender petardos en el interior de una vivienda o edificio, así como arrojarlos desde cualquier piso. Sin lugar a dudas, aunque esta conducta entra dentro de la lógica, no siempre se respeta. Por este motivo, el uso de artículos pirotécnicos en lugares no habilitados se considera una infracción grave. Por lo tanto, cualquier persona que no respete esta medida podrá ser multada (601 a 30 000 euros).
El uso de petardos por los niños
Los menores de edad deberán tener una autorización por escrito de sus padres o progenitores, en la que se certifique que tienen la información necesaria para hacer un uso correcto del material pirotécnico. Además, la compra de los petardos debe hacerse en los lugares autorizados y las etiquetas deben mostrar el nombre y dirección del fabricante.
Por lo tanto, un menor solo podrá tirar petardos de las categorías I y II. En el primer caso, el niño deberá tener 8 años para manejar bengalas, bombetas, smoke balls o fuentes, porque tienen muy baja peligrosidad. Mientras que en la siguiente categoría deberá haber cumplido los 10 años de edad para usar chinos, correcamas o truenos, entre otras opciones.
Los petardos y las mascotas
A nadie se le escapa que las mascotas son las principales afectadas por el ruido que producen los petardos durante estas fechas. Lo normal es que estén muy nerviosas y se escondan debajo de la cama o en lugares apartados, en el caso de los perros y gatos.
El oído de un animal es mucho más sensible que el del humano, por lo tanto, un sonido muy fuerte podría dañarles el tímpano. Las fiestas falleras duran aproximadamente tres semanas, y esto supone una alteración en la rutina de la mascota. Por este motivo, hay que tomar en cuenta una serie de medidas preventivas para que el animal no sufra.
- Si la mascota tiene que quedarse sola, es preferible dejarla en una habitación del hogar donde se sienta cómoda.
- En el caso de los perros, se recomienda que hagan bastante ejercicio antes de que comiencen los petardos para que estén mucho más relajados.
- Asimismo, hay que evitar sacar a las mascotas a la calle en los horarios de mayor ruido. Y si no fuera posible, siempre deberán ir atadas para impedir que huyan o se escapen.
- En el caso de tener pájaros en el hogar, hay que dejarlos en la zona más alejada de los ruidos o focos de la verbena. Incluso, se puede cubrir la jaula con algún material que aísle el ruido, siempre que garantice la buena ventilación.
Cabe resaltar que a lo largo de la historia, las Fallas de Valencia solo han sido suspendidas en algunas ocasiones. Concretamente, en los años 1886, 1896, 1937, 1938, 1939 y el pasado año, con motivo de la pandemia del coronavirus. En este caso, los festejos se aplazaron hasta septiembre.
Incluso este año 2021 tampoco se ha publicado el bando que permite el uso de este material pirotécnico en Valencia capital, debido a la suspensión de estas fiestas en el mes de marzo, aunque cierta pirotecnia recreativa que no sobrepasaba la contaminación acústica sí estaba permitida.
¿Cómo vender rápidamente una vivienda ruidosa?
En algunas ocasiones el ruido puede devaluar el precio de una vivienda hasta en un 50%. Por lo tanto, si un propietario quiere realizar su venta con éxito, lo mejor es ponerse en manos de un grupo inmobiliario con experiencia en el sector. Aunque en el caso de las fiestas tradicionales, las viviendas en zonas próximas a las fiestas solo están sujetas al ruido, unos días al año.
No obstante debemos saber que la contaminación acústica afecta al valor del inmueble. Incluso hay agencias inmobiliarias que no están interesadas en trabajar con este tipo de inmuebles, si entiende que no son vendibles, ni aunque el precio sea mucho más atractivo.
Un exceso de ruido afecta a la calidad de vida de las personas. Ya sea el tráfico rodado, discotecas próximas o un aeropuerto cercano, podría afectar de forma decisiva en la compra final. Pero esto no quiere decir que no existan inversores interesados en cualquier tipo de vivienda porque siempre saben cómo sacarle el máximo partido.
Actualmente, hay una serie de medidas y soluciones arquitectónicas que ayudan a reducir la contaminación acústica y dotan de mayor confort una casa. De hecho, las construcciones a partir del año 2009 han elevado estas exigencias e incluyen materiales que permiten un mayor ahorro energético, que se relaciona también con el aislamiento acústico.
A nadie se le escapa el esfuerzo por impulsar normativas que apuesten por fomentar la calidad acústica. En este sentido, un buen asesoramiento sobre la venta y compra de un inmueble favorece tanto al vendedor como al comprador. No siempre es complejo cerrar un acuerdo comercial si se valoran todas las opciones y se enumeran las ventajas para cada una de las partes.
Hoy en día nos podemos encontrar con muchos chalets a pie de carretera que cuentan con un nivel de aislamiento acústico tan elevado, que difícilmente se oye un ruido. Asimismo hay pisos situados en zonas de bares o mucho tránsito comercial, que tienen una gran demanda porque precisamente sus compradores buscan este tipo de ambiente.
El vendedor debe tener en cuenta que si invierte en aislamiento acústico usando materiales y tecnologías para bloquear o reducir el nivel sonoro, tendrá más posibilidades de venta. Sin lugar a dudas, el aislamiento de paredes y ventanas con doble acristalamiento pueden ser una solución muy efectiva.
Asimismo, el comprador también puede valorar esta opción y lograr una rebaja en el precio si es quien acomete esta serie de actuaciones. De esta forma, podrá usar el material que más le guste y acondicionar la vivienda a su gusto. Hoy en día, hay alternativas sostenibles que ofrecen excelentes resultados.
En definitiva, a la hora de comprar o vender un inmueble al que pueda afectar el nivel de ruidos, tanto de forma permanente como ocasional, lo mejor es dejarse asesorar por profesionales en este sector. Cuenca & Mirasol es un referente en Valencia, ya que cuenta con más de 10 años de experiencia y se caracteriza por el trato directo y la atención personalizada.