Observen la imagen e intenten averiguarlo. Estas son las pistas: el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mide 1,90 metros, tiene 72 años y aparte del golf no suele practicar ningún otro deporte. Aunque viaja mucho, su estilo de vida es sedentario y su gusto por la comida rápida, la típica “Made in America”, es de sobra conocido.
Otra pista, Donald Trump ha engordado un par de kilos en el último año. Es más, se encuentra en los percentiles de obesidad. Aunque según el médico presidencial, Sean Conley, que le ha realizado unas pruebas físicas y análisis, “el presidente se mantiene en un muy buen estado de salud en general”.
Los resultados muestran que Trump se ubica en el rango de obesidad bajo un índice de masa corporal del Gobierno de EE UU ampliamente utilizado que apunta a medir la grasa corporal según la altura y el peso. Si se hace esta “ecuación”, Trump tiene 30,4 puntos, cuatro décimas por encima de la barrera que marca en rojo la obesidad.
Hace poco más de un año, el médico presidencial afirmó que tenía una “excelente salud”, pero advirtió al magnate que debía tratar de perder entre 4,5 y 7 kilos haciendo ejercicio y con una dieta más sana.
¿Y cuánto pesa Donald Trump? De acuerdo con Conley, el presidente pesa 110,2 kg, comparado con los 108,4 kilos que pesaba a principios de 2018.
Fuente: La Razón