La empresa colocará ficus en la rotonda de Cardenal Benlloch y 37 ejemplares en el jardín, a la espera del grueso de la actuación en otoño

El próximo jueves empezará la plantación de los primeros árboles del Parque Central, aunque curiosamente será fuera del ámbito del gran jardín que se abrirá al público el próximo año enfrente de Ruzafa. Los primeros ejemplares, en concreto 13 ficus de unos 4,5 metros de altura y troncos de 25-30 centímetros de diámetro, se colocarán en las medias lunas que forman la rotonda de las avenidas Cardenal Benlloch y Ausiàs March, donde en los últimos meses se han realizado obras de acometidas de canalizaciones hacia la zona verde.

Ese será el primer paso, indicaron ayer fuentes de la sociedad pública, para seguir prácticamente sin interrupción con otras plantaciones ya dentro del parque. La previsión es que lleguen 19 plátanos para el entorno de las naves protegidas y la fuente más grande, además de 18 grevilleas en la acera de la calle Filipinas, colindante con la nave 4.

Será el aperitivo de lo que pasará a finales de año, dado que el millar de árboles que se repartirán en el gran parque dependen para su plantación de la climatología y la marcha de las obras, indicaron las mismas fuentes. Entonces se completará también la rotonda con un arbusto tapizante denominado Vinca difformis, de color blanco. Los plátanos que se plantarán miden siete metros y tienen un perímetro de 40-50 centímetros. Las grevilleas, de cinco metros de altura y 20-25 centímetros de perímetro de tronco, completarán una fila de árboles de esta especie ya existente. Las obras se iniciaron en mayo de 2015 con un plazo de 22 meses, aunque han surgido retrasos por la consecución del suelo y tareas de descontaminación por hidrocarburos.

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