María Oliver considera que las pinturas en las fachadas serán positivas para el comercio y el PP critica el gasto porque el barrio «tiene otras urgencias»

El pasado martes, un día antes de que vecinos del Cabanyal representaran en la plaza de los Pinazo los problemas habituales que sufren en su barrio (tráfico de drogas, peleas de gallos, etc.), la concejal de Gestión del Patrimonio, María Oliver, firmó una resolución por la que el Ayuntamiento gastará 7.000 euros en decorar con dos pinturas murales gigantes fachadas de la zona más degradada, un gasto que se hará efectivo el próximo agosto.

Días después de las críticas vecinales por la inacción del Ayuntamiento en cuanto a la convivencia del barrio, la falta de medidas contra las chatarrerías ilegales y las okupaciones ilegales, el gobierno municipal responde con una iniciativa que pretende la «recuperación de espacios degradados y deprimidos a través de la creación artística», según se lee en el expediente.

«No estamos en contra de que puedan hacerse en algunas fachadas medianeras pinturas murales o grafittis, pero pensamos que el Cabanyal tiene otras urgencias»ALFONSO NOVO

La decisión fue recibida el jueves con críticas por parte de la oposición municipal. El concejal del grupo popular Alfonso Novo dijo que «no estamos en contra de que puedan hacerse en algunas fachadas medianeras pinturas murales o grafittis, pero pensamos que el Cabanyal tiene otras urgencias a las que destinar los miles de euros que quiere gastarse Ribó con la Universidad Politécnica en este tema».

En la resolución se indica que el pasado 9 de mayo, la también concejal de Vivienda impulsó a través de una moción que se «iniciaran actuaciones encaminadas a contratar con la Universidad Politécnica, Centro de Investigación Arte y Entorno el asesoramiento, apoyo tecnológico y artístico para el desarrollo de un proyecto de ejecución de pinturas murales en el Cabanyal».

En opinión de Novo, ese dinero «podía tener un fin social y dedicarse a ayudar a familias con falta de recursos. Como también podría utilizarse para mejorar la limpieza o el mantenimiento de las zonas verdes y deportivas. La rehabilitación del Cabanyal-Canyamelar está paralizada, entre otras cosas, porque los partidos que hoy conforman el tripartito, aunque hablan mucho de participación, nunca han escuchado ni atendido las preocupaciones del día a día de los vecinos».

El contrato se ejecutará el próximo agosto y el citado centro universitario se encargará de buscar a dos artistas para que decoren las paredes. El presupuesto saldrá de la partida de conservación de edificios, por lo que con toda probabilidad serán inmuebles municipales.

La resolución detalla gastos como los 3.000 euros que se dedicarán a honorarios de los pintores, así como 1.165 euros en desplazamientos y dietas. El material saldrá por 500 euros y el alquiler de grúas y elevadoras por otros 1.200 euros.

El gobierno municipal, cabe recordar, tiene más de medio millar de propiedades compradas para ser derribadas en el anterior plan urbanístico. Dos años después de iniciarse el mandato no ha hecho público qué hará con ellas, aunque se espera que los murales «reviertan positivamente en el comercio».

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Campaña de inspecciones a chatarrerías e infraviviendas

La concejalía de Sanidad, en coordinación con la Policía Local, está efectuando una campaña de inspección de las infraviviendas y de las chatarrerías ilegales del Cabanyal. En las primeras quince inspecciones ya se han incoado diez expedientes. El objetivo es clausurarlas, ya que no cuentan con licencia de actividad.

Desde la concejalía explican que están localizando a los dueños de las casas para ver si se han cedido en alquiler o han sido ocupadas. Se están encontrando con arrendamientos falsos o con plantas bajas donde se acumulan metales y a la vez se utiliza como vivienda. De hecho, han iniciado trámites de ejecuciones subsidiarias.

Las inspecciones se prolongarán hasta el verano y se coordinarán con Servicios Sociales para ver la situación de familias con menores. Por otro lado, Servicios Sociales ha pedido a la Policía que identifique a los dos okupas de la calle de la Reina 117 que mantienen bloqueada la creación de un centro de servicios sociales. Se llevó el tema a juicio, pero como no los identificaron, se sobreseyó. Ahora se ha dado la orden de identificarlos porque la reforma cuenta con fondos del Plan Confianza y tiene que estar terminada antes de junio de 2019 para no perder la subvención.