Adosada al muro exterior del templo encontramos una fuente pintada en verde chillón. La misma fue colocada en este lugar en 1859 con el legado efectuado por don Dionisio Bello. La fuente proporcionaba agua potable al Grao en una época en que la única forma de abastecerse de agua era mediante pozos excavados en el suelo. En la misma un niño está sentado sobre una concha marina, mientras cabalga a lomos de un gran pez de cuya boca surge el agua que se derrama en una taza también con forma de concha marina.
Una inscripción situada encima de la fuente dice: Aguas del Turia derrama esta fuente por los esfuerzos del municipio de Valencia. La cooperación del de esta villa y el legado de 80.000 reales de Don Dionisio Bello. 3 mayo 1859.