El concejal aplaza una zona para ciclistas en Marqués del Turia hasta que no expulsen más coches y reduzcan los que entran a la ciudad
Giuseppe Grezzi continúa ideando una ciudad nueva. O casi nueva. Inasequible al desaliento que puedan provocar las críticas a los atascos que se producen en el centro o en las grandes vías como consecuencia de la construcción del anillo ciclista, el concejal de Movilidad Sostenible reconoció el lunes que está en estudio un carril bici por la gran vía de Fernando el Católico, mientras que por Marqués del Turia la infraestructura se ha de posponer por las dificultades que entrañaría su construcción. También avanzó el edil que quieren segregar el carril bus con separadores como se ha hecho en la calle Colón o en Matías Perelló.
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Grezzi hizo estas declaraciones en el programa «Todo ciclismo» de UPV Radio. Explicó que junto al carril bici de Fernando el Católico están estudiando otro en Primado Reig. La infraestructura entraña más complicaciones, reconoció el edil, en otra gran vía, en la de Marqués del Turia (nada dijo de Germanías o Ramón y Cajal). «El anillo ha desplazado vehículos al segundo cinturón», explicó Grezzi, confirmando así lo que este diario publicó en su momento del aumento del tráfico en las grandes vías tras la construcción de la ronda ciclista. «Hay dificultades si queremos proteger el carril bus. Ahora mismo es complicado hasta que no desplacemos más coches y reduzcamos la cantidad de coches que entran a la ciudad», avanzó el concejal de Movilidad.
Lo cierto es que el carril bici en las grandes vías se trata de un proyecto antiguo, que durmió el sueño de los justos en los cajones municipales después de que el anterior concejal de Tráfico, Alberto Mendoza, del PP, lo descartara porque supondría eliminar prácticamente un carril por sentido en las grandes vías, donde hay tres por cada sentido así como el carril bus. En ningún caso se planteó, ni se plantea ahora, que el carril bici circule por los jardines centrales de las grandes vías, porque la intención de Movilidad es restar espacio para el coche y recuperar terreno público para peatones y ciclistas.
Se trata, además, de una petición muy repetida a lo largo de los años por colectivos ciclistas de la ciudad, como València en Bici, que hace poco incluso iniciaron una campaña en las redes sociales a este efecto. Además, el carril bici en las grandes vías apareció en los presupuestos participativos de este año, pero el proyecto se desechó por el coste que tenía, que superaba los presupuestos asignados para los distintos distritos por los que discurren las grandes vías. Sin embargo, el Consisotrio ya encargó a comienzos de año un proyecto para las grandes vías que costó 5.808 euros.
