La vicepresidenta de la Diputación de Valencia, Maria Josep Amigó, y el diputado de Informática y Desarrollo de la Administración Electrónica, Iván Martí, presentaron recientemente el programa «Smartcities Dival», que se implantará a modo de experiencia piloto en Alzira, Genovés, L’Olleria, Venta del Moro y Xeraco. Según Amigó, se trata de acercar el concepto de ciudad inteligente a todo tipo de poblaciones, independientemente de su tamaño, equiparando así a los habitantes de las grandes poblaciones y los de los pequeños municipios, «que es por lo que debe velar la Diputación».
La vicepresidenta explicó que la idea es que los propios ayuntamientos, «que son quienes conocen la realidad de su pueblo, apliquen en función de sus necesidades las enormes posibilidades que ofrece una ‘smartcity’, y con esas experiencias diseñar programas extrapolables a otros municipios».
«Al final se trata de que las corporaciones tengan autonomía para aplicar de manera práctica las herramientas que se ponen a su servicio, y que los ciudadanos tengan un mejor acceso a la información que se genera en su localidad», concluyó.
Por otra parte, el diputado de Informática y Desarrollo de la Administración Electrónica afirmó que «el concepto ‘smartcity’ supone un paso más allá en la modernización de los servicios municipales, porque está diseñado para conseguir más eficiencia, ofrecer mejores servicios a los ciudadanos, ahorrar costes, disminuir emisiones contaminantes e impulsar todo tipo de iniciativas sociales, culturales y medioambientales».
En este sentido, Martí destacó dos grandes ámbitos en los que incide este proyecto: por un lado, mejorar la eficiencia energética, lo que redunda también en un ahorro económico, y por otro, facilitar la gestión de los indicadores de los municipios mejorando así el acceso a la información por parte de la ciudadanía.
18 meses de prueba
El programa «Smartcities Dival» tendrá una duración inicial de 18 meses. Durante ese tiempo, el objetivo es conocer a fondo sus potencialidades, desarrollar aplicaciones prácticas y detectar dificultades, antes de extender el modelo al resto de la provincia.
El primer paso será la recogida y almacenamiento de datos. A continuación, esta información pasará a formar parte de una gran plataforma, desde la que se desarrollan aplicaciones concretas para mejorar la gestión de los servicios.
La información contenida en la plataforma incluirá tanto los datos de los que ya dispone el ayuntamiento, porque proviene de otras vías, como los que aportan los sensores que se instalan en diversos puntos de la ciudad.
Source: Comunitat Valenciana