La Fiscalía de la Audiencia Nacional no contempla otra posibilidad que no sea que el cadáver del empresario aragonés Publio Cordón esté enterrado en Mont Ventoux, en el sureste de Francia, la versión a la que da más fiabilidad y que siempre ha mantenido el terrorista del GRAPO Fernando Silva Sande, que lleva colaborando con la Guardia Civil desde 2008.
Según han explicado a Europa Press fuentes jurídicas, el Ministerio Público descarta así el relato contenido en la sentencia de dos ‘grapos’ condenados por el secuestro de Cordón, la cual mencionaba en uno de sus epígrafes que Silva Sande había cambiado su versión y ahora situaba el lugar del entierro de los restos del empresario en los Pirineos.
Durante el juicio contra José Antonio Ramón Teijelo y María Victoria Gómez Méndez, acusados de custodiar al empresario aragonés en su secuestro en Lyon en el verano de 1995, uno de los testigos de la acusación fue Fernando Silva Sande, quien ya había sido condenado por estos hechos.
En su testimonio en la vista oral, Silva Sande confirmó la versión que ha mantenido desde que colabora con la Guardia Civil, y es que cuando llevaba unas semanas secuestrado, Cordón trató de escapar, cayó por una ventana y los ‘grapos’ encargados de su vigilancia no le auxiliaron, a consecuencia de lo cual falleció.
El exdirigente del grupo terrorista reiteró una vez más ante el tribunal que el cadáver fue trasladado a Mont Ventoux, pero que no recuerda el lugar exacto del entierro al no conocer la zona, razón por la cual los restos del empresario nunca han podido ser recuperados y entregados a su familia.
Un mes después de este testimonio, los magistrados de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional explicaban en la sentencia en la que condenaban a 30 años de prisión a Teijelo y Gómez Méndez que Silva Sande les había enviado «un escrito donde refiere que llevaron el cadáver a los Pirineos, cordillera que está bastante alejada del Mont Ventoux».
Fuente: La Razón