La Policía holandesa busca a dos niños armenios, Howick, de 13 años, y Lili, de 12, que escaparon hoy de su casa para evitar ser expulsados a Armenia, donde se encuentra su madre desde hace un año, cuando su solicitud de asilo fue rechazada por octava vez en la última década.
En un comunicado, la Policía holandesa pidió ayuda a los ciudadanos para localizar a los dos adolescentes y aseguró estar «preocupada por la seguridad y bienestar de los niños» que se encuentran en paradero desconocido.
Los pequeños, que nacieron en Rusia y no han estado nunca en Armenia, han luchado contra su deportación en el último año, desde la expulsión de su madre, con protestas, diferentes campañas e incluso escribiendo cartas al Gobierno holandés y al rey Guillermo Alejandro para pedir su apoyo.
El caso ha tenido mucha repercusión en Holanda, ya que ambos menores llegaron con dos y un año de edad, por lo que han vivido prácticamente toda su vida en La Haya, han estado recibiendo su educación en holandés y no son capaces de hablar el idioma de su país de origen.
Las autoridades holandesas tenían programado expulsar hoy a Howick y Lili, lo que provocó que estos huyeran de madrugada de la casa de sus abuelos.
La institución de tutela Nidos, responsable de la expulsión de los niños, tenía a uno de sus empleados en la casa de los abuelos para vigilarlos hasta su traslado al aeropuerto, pero aun así los pequeños lograron escapar.
El pasado mes, el Consejo de Estado tuvo la última palabra en este caso y dictaminó que los niños no pueden quedarse en Holanda, país al que llegaron en 2008, por considerar que no hay justificación para otorgar el asilo.
El secretario de Estado holandés, Mark Harbers, también apoyó la expulsión y señaló que el caso ya fue juzgado legalmente ocho veces y el resultado siempre fue el mismo: Armenia es un país seguro.
El primer ministro, Mark Rutte, también consideró que «hay que ser estrictos» en este tipo de casos y rechazó mantener a los dos adolescentes en Holanda.
Fuente: La Razón