Aplicar la cláusula de salvaguarda en acuerdos comerciales de la UE con terceros países es posible. Así lo demuestra el hecho de que ayer la Comisión Europea aprobara dicha medida para el sector del arroz, de manera que los pactos de importación de este cereal que existen con Camboya y Myanmar (Birmania) quedan anulados. Esto implica que durante los próximos tres años estos países deberán pagar aranceles para introducir su arroz en la UE (175 euros por tonelada el primer ejercicio, 150 euros el segundo y 125 euros el tercero).
Y esto es precisamente lo que los agricultores valencianos exigen desde hace meses para el sector de los citrícos, arruinado por la entrada de naranjas de países como Sudáfrica. El pacto alcanzado ayer sobre el arroz sienta un precedente que los productores esperan que sirva para que el Gobierno español se ponga ya manos a la obra.
«El Gobierno italiano ha capitaneado el proceso para solicitar la cláusula de salvaguarda en el arroz, y queremos que el español haga lo mismo con los cítricos», explicaron ayer desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA). Pero para ello deben empezar ya, puesto que todo el proceso puede alargarse hasta tres años, un periodo muy largo durante el cual la entrada de estas naranjas extranjeras pueden acabar de destrozar el sector.
Para lograr que la Comisión Europea apruebe la suspensión de un acuerdo comercial con otro país, hay que presentar datos que se hayan recogido durante años en los que se demuestre que las compras a otros países han provocado un daño real en la economía de los productores.
Por ejemplo, en el caso del arroz los informes presentados demostraron que durante las últimas cinco campañas los envíos del cereal se han multiplicado por 40, al pasar de 9.000 toneladas en 2012 a 360.000 en 2017, provocando un hundimiento de las cotizaciones del arroz cultivado en Europa.
Este es el trabajo que se debería de realizar a partir de ahora con los cítricos. Por el momento, el ministro de Agricultura, Luis Planas, durante su visita a Valencia el pasado lunes, anunció que solicitarán a la UE que se realice un seguimiento de los datos en el sector citrícola para tomar esta medida en el caso de que sea necesario. Hasta ahora el PSOE se había mostrado contrario a solicitar esta medida, a pesar de que tanto desde las organizaciones agrarias como desde la propia Conselleria de Agricultura se estaba demandando.
Fuente;: La Razón