El nuevo modelo de prestación farmacéutica para las personas que se encuentran en residencias de mayores y que pondrá en marcha la Conselleria de Sanidad el próximo año ha soliviantado a las oficinas de farmacias. Con el nuevo plan, las boticas dejarán de dispensar directamente los fármacos a las residencias, pues será una central de distribución controlada por el hospital La Fe la que se encargue de ello. El previsible descenso en el volumen de facturación y, sobre todo, el hecho de que se trate de una decisión unilateral que no se ha consultado a los Colegios profesionales, llevó ayer a estos a romper las relaciones con el Departamento que dirige Carmen Montón.
Tras conocer el anuncio, el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, Jaime Giner, se mostró «sorprendido» de la actitud de la consellera, pues se les «había prometido diálogo y consenso». A su juicio, la actitud de Montón «denota que no se cuenta con los Colegios para la atención farmacéutica domiciliaria».
Es más, Giner lamentó que solo se les pida colaboración para temas económicos, como es la subvención del copago. Así que, como respuesta al plan de Sanidad, las farmacias anunciaron que dejan en suspenso cualquier colaboración con la Conselleria, lo que implicaría el cese de este apoyo al copago, «mientras no se aclare el papel del farmacéutico en la sanidad valenciana».
Giner aclaró que el Colegio apoya la creación de puestos de trabajo en la farmacia hospitalaria (Sanidad promete 65 nuevos empleos) y los considera, además, necesarios, «pero ello no debe ir en detrimento de la farmacia comunitaria».
Source: Comunitat Valenciana