Los vecinos de Ruzafa piden sonómetros al Ayuntamiento

Los vecinos de Ruzafa piden sonómetros al AyuntamientoLa asociación vecinal pide «llevar a cabo un seguimiento efectivo de la contaminación acústica y cumplir con las exigencias normativas sobre evaluación y gestión del ruido»

La asociación vecinal Russafa Descansa ha reclamado hoy al Ayuntamiento de Valencia a situar sonómetros en el núcleo histórico tradicional del barrio de Ruzafa para «llevar a cabo un seguimiento efectivo de la contaminación acústica y cumplir con las exigencias normativas sobre evaluación y gestión del ruido». Así lo han expresado desde la asociación en un comunicado, en el que denuncian que, según el último mapa municipal de ruido, que data de 2012, 8.000 vecinos de este distrito padecen niveles de ruido excesivo, lo que supone uno de cada tres habitantes.

Desde este último mapa de ruido, añaden los vecinos, los establecimientos hosteleros y las autorizaciones municipales de terrazas han «proliferado sobremanera» en el barrio de Ruzafa, pues «este Ayuntamiento no ha parado de conceder nuevas licencias y rescatar antiguas licencias hosteleras, incluidas discotecas y discopubs en zonas de predominio residencial». Asimismo, aseguran que no son 300 los establecimientos públicos que hay actualmente en Ruzafa, sino un total de 350 locales y 250 terrazas mapificados por esta asociación vecinal, con lo que concluyen que la limitación en las licencias que pretendía controlar la saturación del barrio ha sido «contraproducente».

Desde Russafa Descansa recuerdan que el Ayuntamiento de Alicante instalará aparatos medidores de ruido en el Casco Antiguo a petición de sus vecinos, resultado del proceso de presentación de propuestas en los presupuestos participativos para 2016. «En el barrio de Ruzafa es una cuestión de voluntad política del actual gobierno municipal de Valencia», afirman.

Sin embargo, los vecinos tienen claro que medir «no implica necesariamente reducir el ruido ni sobrellevar las molestias asociadas», por lo que piden al gobierno municipal que no solo elabore mapas de ruido, sino que establezca también planes efectivos de acción contra el ruido, más allá de aumentar la presencia policial, para atender a las causas de la saturación acústica. Asimismo, recuerdan que este mismo colectivo vecinal presentó hace tiempo a todos los responsables municipales con los que ha mantenido reuniones un plan integral para la desaturación acústica y la recuperación de los espacios públicos de Ruzafa.

En 2017, el Ayuntamiento elaborará el próximo mapa de ruido de la ciudad de Valencia y desde la asociación advierten de que, sin medidas correctivas de alcance, en ese nuevo mapa los niveles de ruido y los vecinos afectados de este barrio ya duplicarán los 8.000 residentes, más de la mitad de su población actual. «El barrio de Ruzafa no es una zona de ocio, es el entorno vital de casi 24.000 vecinos y una zona de predominio residencial, y el Ayuntamiento de Valencia no está garantizando ni priorizando la convivencia, el respeto y el derecho al descanso de los que sí residen en este barrio», denuncian. Por ello, concluyen, con que solo cabe «reclamar e iniciar el legítimo proceso de protección de los derechos más básicos de sus vecinos ante tanto desamparo» en la ciudad de Valencia y ante el «silencio municipal».