El sistema de salud de la norteña provincia argentina de Tucumán practicó este miércoles una cesárea a una niña de 11 años, violada por la pareja de su abuela, pese a que manifestó su deseo de abortar y la ley argentina contempla la posibilidad de aborto en casos de violación y peligro de salud.
«Ha sido obligada a parir. Además de ser víctima de violación e intentar suicidarse dos veces, su salud corría peligro», expresó a Efe la abogada tucumana de Católicas por el Derecho a Decidir y Mujeres X Mujeres, Soledad Deza. La gestación se detectó en la semana 19, el 31 de enero, y fue por entonces cuando la niña manifestó su deseo de abortar. «Quiero que me saquen esto que me puso adentro el viejo», dijo la pequeña según figura en la historia clínica adjuntada a la causa judicial y que trascendió a los medios.
Fuentes judiciales adelantaron que se llevaría adelante la interrupción del embarazo (ILE). Sin embargo, ayer el gobierno tucumano comunicó que abogaba por salvar las dos vidas y hoy, en torno a la semana 24, se le practicó la cesárea.
El presunto violador permanece preso.
Fuente: La Razón