Dimitri Rogozin, director general de Roscosmos, la agencia espacial rusa, reconoció ayer en una entrevista en el Canal 1 de Rusia que no saben cuál es el objetivo de la nave espacial más secreta de Estados Unidos, la X-37B, una aeronave reutilizable que ha viajado ya varias veces al espacio y ha regresado y que en principio debería ser el sustituto del programa de lanzaderas espaciales que tuvo la NASA y que fue suspendido.
Rogozin confesó, según la web RT, que Moscú no ha recibido ni espera recibir “explicaciones oficiales” sobre el objetivo de esta aeronave, aunque, según cree, el vehículo en realidad “puede ser utilizado como portador de armas”.
Pero, ¿qué es realmente el proyecto X-37B?, ¿por qué tanto secretismo por parte de Estados Unidos?
Fuente: La Razón