Un club de danza argentino recuerda que estos encuentros junto a la costa se organizan cada verano desde hace más de 14 años
El Consistorio impide las milongas los sábados en la playa
El Club de Tango Comunidad Valenciana denunció ayer que la Demarcación de Costas ha denegado el permiso para bailar tango en la última rotonda de la Malvarrosa, junto a Alboraya, todos los sábados de agosto tras recibir un informe desfavorable del Consistorio, que dice que hay «denuncias vecinales por las molestias provocadas por el ruido». Sin embargo, el enfado en la asociación es mayúsculo. El presidente de la misma, José Ibáñez, critica que el Ayuntamiento sí ha autorizado un evento muy similar, de baile latino, que se celebra a la misma hora los viernes.
La asociación pidió autorización entre los pasados 1 y 13 de junio. La Demarcación de Costas, a través de la Delegación del Gobierno en la C. Valenciana, pidió informes a la Agencia Valenciana de Turismo (AVT) y al Consistorio. La AVT emitió informe favorable el 21 de junio, pero el 8 de julio llegó el dictamen municipal: no era favorable. Según la resolución de la Demarcación a la que ha tenido acceso este diario, el informe del Consistorio indica que en el emplazamiento donde se llevan celebrando las «milongas» desde hace 14 años «ya consta la autorización de una actividad similar los viernes de verano a otra asociación de baile, habiéndose producido, además, quejas de los vecinos de la zona por este tipo de actividades con repercusión sonora que se extienden hasta las 2 de la madrugada». La autorización se había solicitado para los sábados 6, 13, 20 y 27 de agosto de 2016 entre las 23 y las 2 horas del día siguiente.
Por esos motivos, y teniendo en cuenta, según el Consistorio, «la sobrecarga de actividades y afluencia de personas del ámbito solicitado durante los meses de verano», el servicio de Ocupación de Dominio Público Municipal emitió un informe desfavorable en el que se ha apoyado Costas para denegar el permiso.
A juicio de Ibáñez, esta decisión supone «un claro agravio comparativo que, además, afecta a muchísimas personas». En su asociación hay unos 160 bailarines pero a estos eventos acuden unas 40 personas. «No hacemos daño a nadie, no molestamos y viene mucha gente a curiosear. Además, llevamos haciéndolo 14 años», dijo Ibáñez. El presidente de la entidad aseguró que nunca han recibido «queja alguna de los vecinos», que además viven «lejos de la rotonda donde nos ponemos». Ibáñez se ha reunido con funcionarios municipales y de la Demarcación de Costas y ha pedido las denuncias vecinales, pero no le han sido facilitadas.
Aunque para este año ya dan por perdido el mes de agosto, están buscando posibles ubicaciones alternativas para el año que viene. Además, el próximo sábado día 20 organizarán un acto reivindicativo en el mismo punto. «Iremos a cenar con mesas y sillas como hace mucha gente del Marítimo, pondremos una pancarta explicando lo que pasa y bailaremos sin música», dijo Ibáñez, que no entiende por qué el Consistorio no permite una actividad de estas características «mientras se llenan la boca diciendo que hay que recuperar espacios para el pueblo, como en la plaza del Ayuntamiento, donde el otro día organizaron un acto con danzas bolivianas típicas y no pasó nada», explica el presidente del Club de Tango.