El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha llegado esta mañana a Bélgica después de haber pasado los últimos cuatro meses en Alemania, donde fue detenido en marzo y ha estado pendiente de que el Tribunal Superior de Scheswig-Holstein resolviera sobre la euroorden dictada por el Tribunal Supremo español contra él.
Puigdemont ha llegado alrededor de las 9.45 horas a la Delegación del Govern en Bruselas y se ha encontrado con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y con los exconsellers Toni Comín y Meritxell Serret, ahora delegada de la Generalitat en la capital belga.
Durante la comparecencia conjunta, Torra ha manifestado que el «Estado ha perdido esta batalla y vendrán más». Mientras, Puigdemont aseguraba que su viaje «no acaba aquí» y que irá «hasta el último rincón de Europa» en defensa de la «justa causa del pueblo catalán» y hasta que sean puestos en libertad todos los independentistas en prisión. Asimismo, lanzaba una clara advertencia al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al que exige que «se ponga a hacer los deberes pendientes, porque su periodo de gracia se acaba».
«Hoy es un día importante en el terreno político pero también en el emocional», ha afirmado Puigdemont, que ha afirmado que ha tardado «cuatro meses y cuatro días» en llegar a Bruselas, a donde viajaba cuando fue detenido en Alemania en cumplimiento de una euroorden que fue retirada el pasado jueves por el Tribunal Supremo.
Puigdemont ha comparecido junto al actual presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, así como con el resto de exconsejeros huidos y algunos nuevos miembros de la Generalitat, como Laura Borràs, Jordi Puigneró y Maria Àngels Chacón.
Fuente: La Razón