Manolo García, que por tercer año consecutivo es el artista fallero municipal, atiende a LA RAZÓN en su taller de artesanía, donde se puede observar varias piezas de la Falla del Ayuntamiento, estando el muñeco más grande dividido en tres naves.
-¿Cómo ha llegado a ser artista fallero?
De pequeño me gustaba la pintura y a la edad de trece años quería ser aprendiz de pintor. Como vivía aquí al lado (en referencia a la actual Ciudad Fallera) me pasaba el día viendo a gente pintar en los talleres. Un día, un amigo y yo fuimos a pedir trabajo y nos dijeron que sí, y así trabajé durante ese verano. Como me gustó tanto, al salir del colegio pasaba por mi casa e iba directo al taller de Manolo Martínez, carpintero y la persona que me enseñó este arte, por lo que dejé a un lado la pintura para centrarme en la carpintería ya que me gustaba más.
-Y luego…
A partir de ahí fue cuando empecé a realizar piezas para muchas fallas. Al principio mi trabajo siempre estaba en la sombra, hasta que innové utilizando la técnica de la vareta, que es cuando la gente empezó a fijarse en ellas y a darse cuenta que algunas quedaban mucho más bonitas. Desde entonces siempre hago mis fallas con esta técnica (consiste en la modelación de figuras utilizando listones de madera finos). Me las solían tapar con una pequeña capa de barro para luego empapelarlas, hasta que decidí que las fallas que yo hiciese no se iban a tapar más.
-¿De qué material están hechas sus fallas?
Para realizar las vareta utilizamos chopo, por quees uno de los materiales más baratos y además es de uno de los mejores materiales debido a que es fácilmente moldeable. El pino tiene el inconveniente de que se agrieta, por lo que lo utilizamos para los soportes de la falla. También cabe la posibilidad de utilizar olmo, pero es infinitamente más caro que el chopo.
-¿Fue entonces cuando usted realmente se dio a conocer?
Yo tuve que empezar en Alicante ya que en Valencia es muy difícil que te dejen innovar. En la ciudad alicantina hice tres fallas para la hoguera Hernán Cortés y tuvieron muchísimo éxito, por lo que al año siguiente presenté como boceto para el Ayuntamiento de Valencia el Leonardo Da Vinci, que me lo denegaron y fue así como la falla Na Jordana me pidió que lo hiciera para ellos. En 2013, volví a presentar otro proyecto para el Ayuntamiento, esta vez el Moisés, y me lo volvieron a denegar. Finalmente ese año hice el caballo de Troya para la falla Na Jordana, otra vez. En mi objetivo de realizar la falla para el Ayuntamiento, en 2014 insistí y presenté varios esbozos y me aceptaron el Moisés.
El año siguiente también me eligieron y realicé el León.
-¿Y este año qué nos depara?
Hace varios años, le propuse la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá representar en una rotonda el símbolo del artesano. Le presenté el boceto que dibujó Rafael Contreras y a ella le gustó, de hecho hubo intención de hacerlo, pero con la crisis todo se vino abajo. Como mi ilusión era hacer un homenaje a los artistas valencianos de toda índole, del mueble, cerámica, juguetes, etcétera., utilicé ese cartucho para este año. Además quería aportar mi granito de arena para que la Unesco declarara a las Fallas Patrimonio de la Humanidad.
-¿Cómo se financian los artistas falleros?
Nosotros pedimos un préstamo al banco para poder realizar la falla, y una vez acabada, es cuando el Ayuntamiento nos reintegra lo acordado previamente. De todas maneras, con las fallas no se come bien, sin embargo cada año mantengo la ilusión de poder realizar la falla del Ayuntamiento.
Source: Comunitat Valenciana