Joan Fuster pondrá nombre a la vía que actualmente recuerda a Eduardo Marquina, autor de la primera letra de la Marcha Real
El equipo de gobierno que preside Joan Ribó aprovechará el cambio de denominación de 51 calles en Valencia para dedicar una plaza a Joan Fuster, el inventor del mito de los «países catalanes».
La propuesta de la Concejalía de Cultura, controlada por Compromís, se basa en un informe de la Universitat de València que ha detectado el medio centenar de vías cuyo nombre «contradice la Ley de Memoria Histórica, y específicamente su artículo 15, que establece que las administraciones públicas tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura».
De esa forma, la actual plaza de Eduardo Marquina, autor de la primera letra oficial que tuvo el himno nacional español, pasará a llamarse plaza de Joan Fuster.
De esa forma, el Ayuntamiento dedica el emplazamiento al escritor de Sueca, inspirador de los movimientos nacionalistas de izquierdas en la Comunidad Valenciana, fue el primero en usar el término de «países catalanes» –empleado en la actualidad por los independentistas para agrupar a Cataluña, la Comunidad Valenciana y Baleares- con intencionalidad política. Corría el año 1962 y en el ensayo tiulado «Nosotros los valencianos» Fuster dejó escrita la sentencia de que «llamarnos valencianos es nuestra forma de llamarnos catalanes».
El listado de los nombres que las nuevas calles que lucirá Valencia antes de verano incluye reconocimientos genéricos, que van desde la literatura al cine, hasta científicas como Marie Curie (que sustituye a Alfonso Peña) o escritoras como Gloria Fuertes (en la actual calle Ramón Contreras Mongrell).
El critica las «prioridades» del alcalde
Al respecto, el portavoz del Grupo Popular, Eusebio Monzó, ha criticado que el alcalde dedique tiempo y recursos públicos a cambiar el nombre de las calles de la ciudad y a buscar el enfrentamiento “mientras tiene otros temas que preocupan más a los valencianos totalmente olvidados.”
De esta manera, Monzó ha destacado que “para Ribó es más importante cambiar el nombre de las calles y de las plazas de Valencia que mantenerlas limpiarlas o que en ellas la circulación sea fluida y segura.”
