Un hombre de nacionalidad francesa ha matado a su mujer, de origen español, a su hijo de dos años, a la madre de ella y a su actual pareja, ha quemado la casa familiar y se ha suicidado. Los hechos se produjeron en la localidad francesa de Pau. Los vecinos escucharon una fuerte discusión en la casa en torno a las cinco de la mañana, aunque la primera llamada que recibierion los bomberos por la presencia de fuego fue a las 06:40 horas, cuando se declaró un incendio en una vivienda situada en el primer piso de un edificio de cuatro plantas en la calle Richelieu, de Pau, al sur de Francia, que ha obligado a evacuar a 27 vecinos.
Los cuatro españoles son vecinos de la localidad sevillana de Pilas.
En este sentido, el Ayuntamiento de Pilas, en un comunicado, ha informado de que las autoridades francesas han confirmado que la familia asesinada este martes en Pau son vecinos de la localidad sevillana.
Ante este trágico suceso, el Ayuntamiento ha mostrado su «más profundo pesar» y expresa sus condolencias a familiares y amigos de J.M.R., de 65 años, y su pareja sentimental, de M.M.P., de 36 años, y al hijo de ésta última, de apenas dos años. A tal efecto, fuentes de la Delegación del Gobierno central en Andalucía han precisado a Europa Press que J.M.R. era natural de Pilas, mientras las mujeres víctimas del crimen habían nacido en Sevilla capital, toda vez que se espera que este jueves sean practicadas las correspondientes pruebas de autopsia a los cadáveres.
En cualquier caso, el alcalde del Pilas, José Leocadio Ortega, ha convocado para las 20,00 horas de este martes, una junta de portavoces con carácter urgente.
Fue uno de los vecinos el que alertó a los bomberos después de intentar abrir la puerta de la vivienda en la que se produjo el incendio, a la que intentaba acceder después de haber visto sangre goteando sobre la repisa de la ventana de la vivienda, informa «Le Parisien». Cuando los bomberos lograron entrar en la casa, descubrieron cinco cadáveres y un sofá que estaba ardiendo.
Fuentes de la investigación indicaron que la mujer estaba atada y amordazada y podría haber muerto ahogada en la bañera de la casa. Los padres de ella, también españoles, presentaban signos de haber sido golpeados con un objeto contundente, mientras que el pequeño de dos años no presentaría signos de violencia, por lo que podría haber muerto asfixiado por el humo del incendio.
Al parecer, el asesino habría incendiado un sofá después de que una fuerte discusión familiar acabara en el asesinato de los cuatro miembros de su familia y su posterior suicidio.
La víctima española tendría según la prensa francesa 36 años y era profesora en prácticas de español en el colegio de La Hourquie, en Morlaàs. El marido y presunto agresor tenía 32 años.
Según el adjunto al alcalde de Pau y responsable del dispositivo de seguridad, Jean-Paul Brin, al entrar en el domicilio había sangre por todas partes.
Fuente: La Razón