La joven, una croata de 19 años, fue detenida por forzar una vivienda, tuvo contracciones en los calabozos y se fue de La Fe sin su niña tras quedar libre.
La Policía Nacional está tratando de localizar a un joven de 19 años de origen croata sospechosa de un delito de abandono de menor después de marcharse del Hospital La Fe sin su bebé, una niña recién nacida que ahora quedará provisionalmente bajo tutela de la Generalitat. La chica fue arrestada el viernes cuando colaboraba con otras dos jóvenes en un intento de robo, dio a luz bajo custodia policial y huyó del hospital sin la pequeña una vez puesta en libertad.
La triste y rocambolesca historia arrancó a las cinco de la tarde del viernes. A esa hora, la joven, acompañada de otras dos de su misma nacionalidad de 20 y 21 años, estaba intentando entrar a robar en casas del distrito de Tránsitos, en Valencia. Un testigo puso en alerta a la Policía Nacional al ver cómo dos de ellas llamaban a los timbres de las casas mientras otra vigilaba.
Una patrulla puso rumbo al lugar y los agentes observaron a una de las sospechosas agazapadas en un portal. «Había dos junto a la cerradura y otra ocultándolas», describieron fuentes de la Jefatura Superior. Al detectar a los policías trataron de ocultarse entre los coches y arrojaron debajo dos destornilladores y un trozo de plástico, utilizado para abrir cerraduras con el conocido método del resbalón.

Tras un cacheo superficial les intervinieron un par de guantes en un bolso y acabaron detenidas por un delito de robo con fuerza en grado de tentativa. Una vez en dependencias policiales, se ignora si en calabozos o durante una toma de declaración, la joven de 19 años, que estaba en avanzado estado de gestación, comenzó a sentir fuertes contracciones.
Los agentes de la Policía Nacional la auxiliaron y la trasladaron al Hospital La Fe de Valencia. Allí recibió asistencia médica y se comprobó que el parto era inminente. A las pocas horas, la joven dio a luz una niña. Cuando nació, la croata todavía permanecía bajo custodia policial, como marca el protocolo para personas hospitalizadas durante su periodo de arresto. Sin embargo, el agente que la vigilaba abandonó La Fe después de que el juez acordara su puesta en libertad. Lo mismo sucedió con las jóvenes que la acompañaban en el momento de la detención.
Pero a las doce del mediodía del domingo sucedió lo inesperado. La madre fue dada de alta, recogió sus pertenencias y se marchó del centro hospitalario sin su hija y sin decir nada a nadie. Al cierre de esta edición, el bebé permanecía en la unidad de neonatos de La Fe y la policía buscaba a la joven.
Según las investigaciones, la sospechosa se saltó por completo el procedimiento legal establecido para padres que toman la decisión de no cuidar a sus hijos tras el parto. Es lo que se conoce como renuncia y para ello deben comunicar de inmediato la determinación al hospital, que a su vez contacta con personal de servicios sociales para así formalizar el proceso. El Código Penal prevé penas de entre 18 meses y tres años de cárcel para padres que abandonan a sus hijos. Si además lo dejan a su suerte en una situación de peligro la condena es mayor.