Venezuela: Los cuatro escenarios posibles

¿Qué viene a partir de ahora en Venezuela? La presión internacional jugará un papel clave contra Maduro, así como las protestas dentro del país, especialmente por parte de los feudos del chavismo. Estos son cuatro elementos a tener en cuenta:

Intervención militar de EE UU

Puede suceder, más si se tiene en cuenta que Venezuela ha pasado a ser un tema de política interna en Estados Unidos, pero creo que aún falta tiempo. El muro de México ocupa el primer lugar de la agenda de Trump. Solo en segundo lugar, Venezuela. Nadie puede predecir la dinámica que alcanzará la situación a partir de ahora. Trump está lejos de ser el político más predecible, pero aun así, en su discurso, la intervención militar aparece como última opción. Su objetivo actual es intentar conquistar a los altos mandos de las Fuerzas Armadas.

Maduro hace concesiones

Si Maduro fuera inteligente y no solo astuto, habría dejado pasar la ayuda humanitaria, involucrando al propio Ejército en actividades humanitarias. Podría estar evaluando dos posibilidades. O agudiza su enfrentamiento, por ahora verbal, en contra de Trump y así desata una épica «antiimperial» en las Fuerzas Armadas, o hace concesiones, intentando no bajar demasiado su perfil. Probablemente en estos momentos está debatiendo el tema con miembros del Gobierno cubano.

Revuelta de los pobres

La desconexión entre el mundo de la pobreza y el régimen parece ser definitiva. Además, no están solos. Guaidó ha mostrado una sensibilidad social solo comparable a la de Henrique Capriles en el pasado reciente. En su discurso alude e interpela a los sectores más pobres como agentes de cambio a diferencia de los más extremistas de la oposición, que los ven solamente como carne de cañón.

Los aliados mueven ficha

Rusia antepone sus objetivos geopolíticos a los eonómicos, y China los económicos a los geo-políticos. Rusia no tiene demasiado que perder en Latinoamérica. De acuerdo a la actual división de las zonas de influencias, los objetivos de Putin apuntan a desestabilizar la zona europea, expandir sus posiciones en Oriente Medio y, sobre todo, reconquistar parte de Ucrania. La solidaridad hacia Maduro es predominantemente retórica. El caso de China es otro: si después de Maduro surge otro gobierno con más solvencia financiera que el actual, le dará su bienvenida.

Fuente: La Razón

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